En el Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia enviado a Bruselas en 2021, el Gobierno se comprometía a establecer el pago por uso en las autopistas y autovías públicas en 2024, pero en este momento la situación política desaconseja seguir adelante con una medida tan impopular.
Para frenar su implantación, el Ejecutivo español se comprometió con Bruselas a aprobar una Ley de Movilidad Sostenible en la que tendría un papel muy destacado el desarrollo ferroviario. Por enésima vez, se intente a fomentar el paso de las mercancías de la carretera al ferrocarril. Esta nueva regulación, que previsiblemente se aprobará en la segunda mitad de 2024, también promovería el uso del transporte público.
Ahora, después de la que la Comisión Europea haya dado el visto bueno a la propuesta española, los peajes se quedan en ‘pause’ y dejarán de inquietar al sector del transporte al menos durante unos meses.
Desde Bruselas explican que han accedido a la modificación en buena medida por el incremento de los costes de los usuarios de las carreteras durante la crisis energética y porque la reforma del Sistema de Comercio de Emisiones (ETS) bajo la premisa “quien contamina paga” ya contempla gravar al transporte por carretera.
Contigo empezó todo
Hay que recordar que el director general de la DGT, Pere Navarro, introdujo ‘involuntariamente’ los peajes en la campaña electoral, y han sido uno de los temas que más ha incomodado al Gobierno de Pedro Sánchez durante los últimos meses.
Europa permite a España aparcar la implantación de peajes
La Comisión Europea ha dado el visto bueno a la propuesta alternativa del Gobierno de Pedro Sánchez para no implantar peajes en España el próximo año. De este modo se desbloquea el acceso a 93.500 millones (83.200 en préstamos y otros 10.300 millones en transferencias). La revisión no afecta a las dos grandes reformas pendientes: pensiones y la reforma fiscal que tiene que estar lista a finales de 2026.
