Durante una semana se inspeccionaron 245.500 camiones y 11.261 buses y se detectaron 38.589 infracciones (camiones: 79.152 / buses: 8.796). En el caso de los camiones, el 26,23% de las unidades controladas recibió algún tipo de sanción. Desde ROADPOL han mostrado su preocupación porque este dato está un 18% por encima de los datos registrados hace un año.
En el caso de los camiones, la mayoría de las infracciones se produjeron en el ámbito del exceso de tiempo de conducción, la configuración o manipulación del tacógrafo, la velocidad y las infracciones técnicas (incluido el sobrepeso y la carga insegura). Un total de 10.368 conductores (9.846 camiones y 522 buses) condujeron su vehículo durante más tiempo del permitido legalmente sin respetar las pausas obligatorias.
También se encontró que 307 conductores circulaban bajo los efectos del alcohol y 106 conductores bajo los efectos de drogas, y en 5.033 casos (4.911 camiones y 122 buses) se encontraron defectos técnicos graves. Se encontraron con sobrepeso 1.695 camiones (< 12 toneladas), 1.211 camiones (> 12 toneladas) y 113 autobuses . La sujeción de la carga fue insuficiente en 1.631 camiones.
En relación con el tacógrafo, en 4.834 veces no se gestionó adecuadamente, y se detectaron 344 manipulaciones en tacógrafos digitales. “La manipulación del tacógrafo adquiere una mayor dimensión cada año. Los beneficios económicos para los transportistas pueden ser grandes, pero los riesgos para la seguridad vial son enormes porque el cansancio del conductor puede dar lugar a situaciones de riesgo en la carretera”, advierte la jefa del grupo de trabajo operativo ROADPOL de la República Checa, Jana Peleskova.
