Un jurado compuesto por más de centenar de operadores de transporte otorgó el premio ‘Camión del Año 2023’ al Scania Super. Su acogida está siendo espectacular en un mercado que mantiene un buen ritmo: “no apreciamos síntomas de parón en la renovación de flotas ni en los nuevos pedidos”
¿Cómo está siendo el ejercicio actual para Scania en España?
Después de los problemas derivados de la pandemia, podemos decir que este año el volumen de producción está siendo normal, y comercializaremos más de 4.000 unidades en España y Portugal. La cadena de producción se está estabilizando y ya podemos cumplir con nuestros clientes.
Las matriculaciones de camiones (>6 ton) en España superarán la frontera de las 25.000 unidades este año. ¿Considera que son las cifras que le corresponden al mercado español? ¿Cómo espera que se comporte el mercado en 2024?
Hay una acumulación de pedidos que no se pudieron entregar en los dos años anteriores. La falta de componentes y los problemas de producción nos afectaron a todos los fabricantes y ahora estamos regularizando la situación. Por ello, creo que este año superaremos tranquilamente la frontera de las 25.000 unidades, hay que tener en cuenta que el último trimestre suele ser muy fuerte en el mercado ibérico.
Prevemos que el mercado también se situará en torno las 25.000 unidades en 2024 porque seguimos recuperando el retraso acumulado en las entregas. Además, vemos que en el mercado se siguen demandando camiones, no apreciamos síntomas de parón en la renovación de flotas ni en los nuevos pedidos.
La pandemia y la guerra de Ucrania lastró la producción de vehículos, ¿ya han conseguido recuperar el ritmo de producción prepandemia? ¿Se han ‘normalizado’ los plazos de entrega?
Lanzamos el nuevo Super justo en pandemia, con nuevos proveedores y componentes y eso generó retrasos que afectaron a la serie anterior y a la nueva serie. Además, Scania Super ha tenido un comportamiento extraordinario y la demanda de unidades no ha dejado de crecer. Este éxito también ha dificultado la estabilización de la cadena de producción.
En 2024, las fábricas de Scania en todo el mundo producirán unos 110.000 camiones. Tenemos la certeza de que cumpliremos con las fechas de entrega comprometidas y seguiremos reduciendo los plazos, que volverán a la normalidad en 2025. En el caso de los camiones híbridos y eléctricos, hay que decir que las entregas son más rápidas, unos tres meses aproximadamente.
¿Los procesos de concentración que se están produciendo en el sector del transporte están cambiando el perfil del cliente? ¿Las flotas tienen más peso hoy en día?
La concentración se está produciendo fundamentalmente en las empresas de transporte frigorífico y pienso que los próximos cinco años se mantendrá esta tendencia. Nosotros como fabricante seguimos atendiendo a todos los clientes como lo hemos hecho hasta ahora: queremos ofrecerles los mejores costes operativos del mercado. Aunque, por supuesto, las concentraciones generan distintos volúmenes de compras y dan lugar a otro tipo de negociaciones.
En cualquier caso, creo que seguirán existiendo flotas grandes, medianas y pequeñas y también autónomos, pero habrá que ver el peso que tiene cada uno de ellos en el futuro.
En el caso de las grandes flotas, ofrecemos la posibilidad de atender el mantenimiento de los camiones en sus propias instalaciones. Supone una notable reducción de tiempos de inmovilización y por consiguiente un incremento de la rentabilidad. Pero Scania adapta su oferta de servicios a las necesidades de todo tipo de cliente.
Scania Super fue reconocido como ‘Camión del Año en España 2023’ por un jurado compuesto por más de un centenar de operadores de transporte y especialistas del mundo de la automoción. ¿Qué acogida le está brindando el mercado español?
Cuando lanzamos el Scania Super anunciamos que el ahorro de combustible sería de un 8%, un porcentaje muy significativo teniendo en cuenta que nuestra gama de camiones ya ofrecía los mejores consumos del mercado. Posteriormente, cuando los clientes tuvieron la oportunidad de probar unidades ‘demo’ las impresiones fueron muy positivas: el ahorro de combustible ha superado el 10% en muchos casos y el comportamiento general del vehículo ha resultado muy satisfactorio. Hemos demostrado a los transportistas que con este producto Scania Super pueden ahorrar 3.000, 4.000 o 5.000 euros al año por camión, dependiendo de la diferencia de consumo con la marca que están utilizando en sus flotas al momento de las pruebas y eso es lo que hace tomar una decisión de compra. Además, en el caso de las flotas estas cifras se multiplican por muchas unidades.
Scania Super es un producto que cubre las expectativas de todos los transportistas y el volumen de demanda no deja de crecer. Ahora que se van ejecutando las renovaciones de flotas de nuestros clientes, transportistas que trabajaban con otras marcas han probado las unidades ‘demo’ y ya nos están realizando pedidos.
Después de más de un año en el mercado, tenemos un volumen de datos suficiente para afirmar que las incidencias están siendo mínimas, se sitúan por debajo de las de generaciones anteriores.
Han apostado fuerte por la electromovilidad en segmento de la distribución. ¿Se está cumpliendo la hoja de ruta marcada para esta tecnología?
A finales de 2020 y en 2021 mostramos a los cargadores nuestros vehículos eléctricos e híbridos para distribución y todos los pudieron probar. Ya hemos entregado más de 80 unidades, fundamentalmente híbridos, aunque el eléctrico, que ofrece 240 kilómetros de autonomía, también ha tenido buena acogida.
Posteriormente, presentamos las otras aplicaciones que pueden tener estos camiones en el ámbito urbano (recogida de residuos, portacontenedores…) y el próximo paso será la llegada de la tractora para ámbito regional, que tendrá una autonomía de 350 kilómetros y se empezará a producir en el primer trimestre de 2024. Esperamos tener unidades de prueba para nuestros clientes a finales de este ejercicio.
De cara al futuro, igual que hemos hecho anteriormente con nuestros motores, nos queremos diferenciar de los competidores. En el ámbito eléctrico, ya contamos con nuestra propia fábrica de baterías, que nos permitirá ofrecer mejores tiempos de carga, más vida útil (casi 10 años) y mayor autonomía.
¿Cuándo llegará la tractora 100% eléctrica? ¿Qué nos puede adelantar sobre ella?
A finales de 2024 estará disponible la tractora para larga distancia con una autonomía de 500-600 kilómetros.
¿Qué papel deben jugar los cargadores en el despegue de la electromovilidad?
Es fundamental que los cargadores apoyen a los transportistas en esta transición hacia un transporte más sostenible. A día de hoy, con las ayudas, el TCO de un vehículo eléctrico sigue estando por encima de el de un diésel (+10% aprox.). En el caso de los híbridos, las cuentas sí salen, y estimamos que en cinco años el TCO de una tractora 100% eléctrica será similar al de un diésel por la economía de escala (no es lo mismo fabricar 1.000 o 20.000 camiones) y la evolución del coste de la energía.
Además, hay que tener presente que la electromovilidad es mucho más que un camión eléctrico. Nosotros ofrecemos soluciones globales a los clientes (análisis de sus rutas, instalación de puntos de carga…) y los acompañamos en todo el proceso.
Scania siempre se ha caracterizado por probar un amplio abanico de tecnologías en su familia de camiones (gas, híbridos, eléctricos, HVO…). ¿Tienen claro cuáles van a ser las opciones más válidas a medio plazo para la larga distancia y para la distribución?
Siempre hemos estado a la vanguardia en pruebas y producción de diversas tecnologías, pero la predominante en cada país dependerá de la matriz energética de cada uno ellos. En el caso de Europa, creemos que la electromovilidad será la principal alternativa. A la larga, los costes van a bajar y va a ser una tecnología competitiva. Considero que el HVO y los camiones híbridos también serán alternativas con protagonismo en el camino hacia un transporte más sostenible. Por su parte, el hidrógeno será válido para nichos puntuales, pero no para larga distancia. Aunque es una tecnología limpia, su producción y distribución son caras.
Las normativas de cada país (incentivos en peajes, restricciones…) y el TCO de cada una de las alternativas serán determinantes en el avance de las distintas soluciones. En cualquier caso, en Scania estamos preparados para ofrecer productos que se adaptan a los contextos que se pueden dar en Latinoamérica, Asia, África o Europa.
¿Cómo valora el previsible aplazamiento de la normativa Euro 7?
En principio, para nosotros la llegada de la Euro 7 no supone un problema porque todos los motores de Super se podrían adaptar para cumplir los requisitos de esta normativa. Y cuando se produzca esta circunstancia, se detendrá el desarrollo de los propulsores diésel.
Al igual que el resto de los fabricantes, consideramos absurdo ir hacia la Euro 7 cuando ya estamos en un proceso de migración hacia otras tecnologías, que posiblemente culminará en la próxima década. En concreto, el objetivo de Scania es que el 50% de la producción sea eléctrica en 2030. Y en 2040-50, el protagonismo de la electromovilidad será máximo.
Scania Smart Dash es una clara apuesta por la digitalización. ¿Será opcional? ¿En qué medida ayudará a mejorar la rentabilidad de los transportistas?
Este producto va a venir de serie en todos los camiones y buses que entreguemos a partir de abril y mayo 2024. Scania Smart Dash interacciona con el conductor y con los sistemas digitales de la compañía, cuenta con dos paneles de instrumentos digitales de gran tamaño.
Todo este aumento en seguridad reduce la siniestralidad de la flota, la fatiga de los conductores y aumenta el tiempo operativo del vehículo, con estos sistemas ayudaremos tanto al conductor como al empresario transportista a dar el mejor uso al camión. Además, cumple con todas las normativas en materia de ciberseguridad que entrarán en vigor a partir de julio.
En 2016, Scania fue el primer fabricante de vehículos industriales que consiguió la certificación ‘Top Employer’. ¿Qué actuaciones están llevando a cabo en a la actualidad para reforzar la importancia del capital humano?
Necesitamos a la gente para que el negocio funcione. Apostamos por ofrecer la máxima capacitación a todo nuestro personal porque queremos que estén perfectamente preparados para todo lo que está a la vuelta de la esquina: no es lo mismo vender un camión diésel que ofrecer una solución de electromovilidad.
Además de ofrecer los mejores productos, estamos enfocando nuestros esfuerzos para que la experiencia del cliente sea excelente. Ellos son el centro del negocio y cuando entran en un taller o un concesionario deben sentirse protagonistas, por ello cada año realizamos importantes inversiones en nuestra red.
El Bosque Scania, que ahora cumple 10 años, también fue otra iniciativa pionera. ¿qué supone para la marca?
Scania tiene una gran trayectoria en el ámbito de la sostenibilidad. Además de los productos, siempre hemos querido ir un poco más allá y así surgió la idea de plantar un árbol por cada camión o bus matriculado en la Península Ibérica. Arrancamos hace 10 años con el Ayuntamiento de Rivas Vaciamadrid y hemos continuado incluso en pandemia. Vamos a dar continuidad al Bosque Scania porque recoge muchos de nuestros valores: reconocimiento a nuestros clientes en la colaboración de este proyecto, entregándoles un certificado por cada árbol plantado por la matriculación de su vehículo, espíritu de equipo, respeto y responsabilidad con el medioambiente, ya tenemos firmado un acuerdo para los próximos cuatro años.
Argentina y Chile ya cuentan con su Bosque Scania y estoy seguro de que esta idea se exportará a más mercados.
¿El mercado de VO está comenzando a reactivarse o aún la oferta sigue siendo limitada?
Al no haber vehículos nuevos, la demanda de VO ha sido elevada durante los últimos años. Nuestros camiones usados también ofrecen unos excelentes costes operativos y los clientes lo saben. Este ejercicio vamos a comercializar unos 1.700 camiones e incluso tenemos vendidas unidades procedentes de renting que se recogerán en los próximos meses. Creo que el año que viene también será bueno en esta área.
¿Qué momento vive la red de servicio de Scania?
Durante la pandemia no cerramos ningún punto de servicio, ni realizamos ERTE ni ERE. Nos esforzamos al máximo para estar al lado del cliente.
El futuro va por el lado de los servicios y queremos ser los mejores porque eso es lo que nos va a diferenciar del resto de fabricantes. Estamos inmersos en un programa que se desarrollará durante cinco años para que los concesionarios hagan inversiones en infraestructuras y se adapten a las nuevas tecnologías. Hay vida para la red con la llegada de la electromovilidad, no tengo ninguna duda. Las horas que se dedican a un diésel también se emplearán en los camiones eléctricos, en otras cosas (intervenciones en las baterías, actualizaciones de software, contratos de mantenimiento de los camiones y sus centros de carga de las baterías, etc.…). Además, hay que tener presente que en los próximos 10-20 años el diésel va a convivir con el resto de las tecnologías (HVO, gas, electromovilidad…), habrá que seguir reparando estos camiones porque no van a desaparecer de un día para otro.
¿Qué objetivos se han fijado para 2024?
Nuestro objetivo es volver a un mercado normal: vender 4.000-4.200 camiones nuevos en el mercado ibérico, unos 1.700-1.800 usados y alrededor de 500 buses. Y seguir con un nivel de servicios que cubra los costes operativos de Scania y de nuestra red.
El PIB sigue creciendo, nada indica que se vaya a producir una recesión, pero hay que tener en cuenta que tenemos dos guerras y nunca se sabe cuál puede ser su repercusión. Por supuesto, tenemos planes de contingencia para otros escenarios.
