»Hay que trasladar las medidas aprobadas a todas las relaciones mercantiles»

Desde GUITRANS aplauden las medidas acordadas con el Gobierno porque “limitarán el grave impacto de la escalada del precio de los carburantes, de manera coyuntural y, sobre todo, ahondan en otras medidas que se vienen adoptando en los últimos meses para acometer mejoras estructurales ineludibles”.

Desde la organización guipuzcoana ponen en valor la batería de medidas publicadas el pasado 2 de marzo con la obligación de actualizar los precios de transporte repercutiendo la subida del carburante, la prohibición de la carga y descarga por parte de los conductores, el cobro de la paralización para esperas superiores a una hora, así como la ley de lucha contra la morosidad.
 
A las que ahora se suman la devolución mensual del gasóleo profesional, la publicación semanal del precio oficial del gasóleo, la ampliación al doble de la dotación económica para las ayudas al abandono de actividad de los transportistas, de 10 a 20 millones, “y el compromiso por parte del Ministerio de presentar un proyecto de ley que asegure que el transportista efectivo obtenga un rendimiento mínimo por su trabajo, asegurando una utilización justa de la subcontratación”, destacan
 
Un acuerdo positivo para todos
“Es un acuerdo positivo para todos, empresas y autónomos, que pone el acento en la mejora de la capacidad negociadora de las empresas de transporte”, resumen, pero advierten de que “de nada servirán las medidas adoptadas si no se reflejan en los contratos de transporte”. A su juicio, esta crisis ha puesto de manifiesto una vez más el escaso margen con el que operan las empresas en el sector, “lastrado por unas condiciones de competencia abusivas que en muchos casos están aprovechando las empresas cargadoras para exprimir márgenes donde no los hay”.
“Las empresas que contratan transporte tienen que ser conscientes de que la ruina del sector es en parte también su ruina por lo que es importante racionalizar la rentabilidad mínima de las empresas de transporte”, concluyen.
 
 
 
 

  • “Son medidas de calado que deben plasmarse en la práctica en la relación mercantil con las empresas cargadoras ya que son las que realmente pueden mejorar la situación del sector”, apuntan.
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