Desde la asociación guipuzcoana de transportistas insisten en que estos peajes “discriminan al transporte pesado y adjudican toda la responsabilidad y la carga de la financiación de las infraestructuras al sector del transporte de mercancías por carretera”. En Etzegarate el 56% de los vehículos que transitan son ligeros y en Andoain el 84%, “pero solo pagan peaje los vehículos pesados, con lo que el principio de que quien usa paga, no se aplica”, lamentan.
Apoyan su postura en un estudio elaborado por el Departamento de Transportes del Gobierno Vasco para medir los costes externos del transporte, que señala que el 54% del gasto contabilizado está asociado a los turismos frente al 24% de los camiones y el 13% de las furgonetas. Asimismo sólo el 37% de esos costes son atribuibles al traslado de mercancías, frente al más del 60% de los que produce el movimiento de personas. “No son los camiones y las mercancías los causantes de los mayores problemas asociados a la movilidad, sino los viajes de personas en un vehículo privado y por carretera”.
En GUITRANS recuerdan que siempre se han posicionado en contra de los peajes, “no hemos cambiado en ningún momento el discurso, independientemente del color del ejecutivo que estuviera gobernando”. Además consideran que las empresas no pueden asumir este coste en este momento en el que la crisis sectorial que el transporte lleva arrastrando, se ha visto agravada por la COVID-19. “El transporte ha de ser tratado como lo que es un sector esencial y atender su problemática concreta, porque si no, no quedarán transportistas a quienes cobrar ni peajes ni impuestos”
Por último apuesta por el dialogo con la Diputación Foral de Gipuzkoa “con el objetivo de mejorar la situación del transporte por carretera, mejorando las condiciones de competencia y promoviendo un mejor reparto de la responsabilidad sobre la financiación de las infraestructuras”.
»El transporte no puede soportar más peajes»
Guitrans aplaude que el Tribunal Superior de Justicia del País Vasco haya declarado nula la Norma Foral 6/2018, que estableció una modificación de los peajes iniciales implantados en la N-I y A-15. “Nos parece positiva en la medida en que cuestiona un sobrecoste inasumible para el sector”, aseguran.
