CETM quiere manifestar que tradicionalmente ha apostado por la seguridad vial y la formación profesional de sus conductores, medidas dirigidas a reducir la siniestralidad. CETM apuesta clara y decididamente por la aplicación de medidas formativas de concienciación de los conductores profesionales, habida cuenta de que las medidas preventivas son mucho más eficaces que las sancionadoras.
La retirada del carné a un conductor profesional implica una sanción accesoria: la inhabilitación para el ejercicio de su actividad profesional. Debe tenerse en cuenta, además, que los conductores profesionales ya tienen una normativa más restrictiva que el resto de los usuarios de la vía, como una tasa inferior de alcoholemia, el tacógrafo, el limitador de velocidad y el reciclaje obligatorio, entre otras.
CETM pretende que la nueva normativa contemple la posibilidad de la recuperación de puntos, a través de cursos de formación y concienciación. Por lo tanto, exigirá en la Comisión creada sobre el carné por puntos, un tratamiento diferenciado entre los conductores profesionales y el resto de los usuarios, a la hora de redactar la norma.
