La ceremonia tuvo lugar en la sede central de Iveco y contó con la asistencia de Petter Johannesen, descendiente de Roald Amundsen y jefe de la expedición, que ha recibido los cuatro Massif de 5 puertas y las dos Iveco Daily 4×4, especialmente equipados para afrontar las difíciles condiciones climatológicas del gélido invierno nórdico.
El recorrido previsto por la expedición obligará a los vehículos a afrontar condiciones muy difíciles para cualquier medio de transporte mecánico, con temperaturas que podrán alcanzar los 50° C bajo cero. Sin embargo, ya a -20° C pueden surgir problemas en las propias características de los materiales y los componentes: los plásticos se endurecen y se vuelven quebradizos; los líquidos y los aceites sufren trasformaciones físicas que rebajan sus prestaciones; las piezas de goma y los cables eléctricos se rompen con más facilidad. Por otra parte, durante la marcha del vehículo pueden plantearse problemas dinámicos, como la rigidez de los amortiguadores y la congelación de los componentes hidráulicos.
Iveco decidió afrontar el reto que suponen todas estas dificultades, facilitando a la expedición unos vehículos adaptados para garantizar su fiabilidad y prestaciones incluso en situaciones límite. Entre las modificaciones aportadas, se protegieron las piezas mecánicas contra los golpes y se adaptaron los sistemas de alimentación de combustible para asegurar su funcionamiento en cualquier situación.