A la espera de que se transponga la directiva europea al ordenamiento jurídico español, a partir de 2027 las empresas estarán obligadas a informar de sus emisiones del año anterior y entregar tantos derechos como toneladas de CO2 equivalente hayan emitido. Esta nueva regulación afectará a empresas de múltiples ámbitos, pero tendrá un impacto significativo en el transporte por carretera.
Durante el 19º Congreso de la CETM, Beatriz Mayo (Repsol) ha explicado que el precio de la tonelada de emisiones de CO2 se podría situar en 45 euros, aunque considera posible que llegue a alcanzar alcanza los 100 euros. Es este supuesto, estima que la repercusión en el coste de cada litro de gasóleo sería de 25 céntimos.
Sostenibilidad económica y social
Cristóbal San Juan, director de Desarrollo de Ontime, ha reconocido que el hecho de tener que compensar las emisiones “es un cambio importantísimo dentro de nuestra actividad”. Además, ha remarcado que la descarbonización supondrá un aumento de los gastos, que se tendrá derivar a los clientes y a la sociedad en general. “La sostenibilidad no debe ser solo medioambiental. También debe ser sostenibilidad económica y social”, ha apuntado.
En Ontime consideran que la descarbonización es “una oportunidad de negocio y de mejora de la actividad” y ya están ejecutando diversas medidas para reducir y compensar las emisiones.
Comenzar a prepararse
Fernando Bernabé, fundador y CEO de Auto Mobility, ha asegurado que hay mucha incertidumbre en relación a esta cuestión “porque la normativa no está del todo desarrollada”, pero ha recordado que en 2025 las empresas tienen que empezar a medir y que en principio habrá que compensar a partir de 2027.
En su intervención, ha señalado que “a medio y largo plazo la solución no es seguir quemado gasóleo y pagar derechos de emisiones”.porque la volatilidad del precio de los derechos de emisiones puede suponer una seria amenaza para la economía cualquier transportista.
Ha animado a las empresas de transporte a prepararse desde ya activando diversas medidas (optimización de rutas, formación de conductores, uso de biocombustibles…) “En este momento la peor decisión es no tomar ninguna decisión”, ha afirmado.
Por último, Bernabé ha lanzado un mensaje tranquilizador:.“No es un reto insuperable, el sector ha superado obstáculos más difíciles en el pasado, pero requiere preparación”.