Renault considera a los biocarburantes como una de las soluciones más eficaces y económicas con las que reducir las emisiones de CO2 a medio plazo. De orígen vegetal, constituyen en efecto una energía renovable y diversificada, que permite limitar la dependencia energética de los combustibles de origen fósil. Su producción a partir de recursos locales presenta una ventaja suplementaria: evitar las emisiones de CO2 en el momento del transporte (por tierra o por mar).
Renault comercializa desde finales de 2006 modelos Trafic 2.0 dCi y Master 2.5 dCi compatibles con el biodiesel B30. Estos modelos, destinados a las empresas que disponen de una flota de vehículos y de una gasolinera específica, se venden a los mismos precios que sus versiones equivalentes en Diesel convencional. Representan las primeras aplicaciones del compromiso adquirido por Renault en el marco del Contrato Renault 2009: «todos los motores diesel en la gama 2009 serán capaces de funcionar con un índice del 30 % de biodiesel». El motor diesel 1.5 dCi 85 CV, presentado en el stand, ilustra la extensión de estos desarrollos a las motorizaciones destinadas a los vehículos particulares.