Cuando queda poco más de un mes para que el WLTP comience a aplicarse, los fabricantes de automóviles advierten de que los consumidores no deberían afrontar un incremento en los impuestos de los vehículos a partir de la entrada en vigor de esta nueva prueba.
Condiciones más realistas
El ensayo WLTP introduce unas condiciones de medida del consumo de combustible y emisiones de CO2 mucho más realistas que la actual prueba de laboratorio, conocida por las iniciales NEDC. Por lo tanto, proporcionará una base más precisa para calcular el consumo y las emisiones de CO2 de un coche.
En la actualidad, 19 Estados miembros de la Unión Europea aplican impuestos a los vehículos basándose en los valores de CO2 obtenidos en las pruebas de laboratorio NEDC, entre ellos España. Simplemente debido a que el WLTP es más representativo que la prueba usada hasta ahora, el resultado obtenido para un mismo modelo será un mayor valor de CO2 si lo comparamos con sus resultados en el NEDC. Por tanto, tendría implicaciones sobre la fiscalidad. Como las prestaciones del vehículo no se verán afectadas, la transición al WLTP no debería tener un impacto negativo para el consumidor en la fiscalidad soportada por los vehículos.
“Debemos asegurarnos de que los impuestos basados en las emisiones de CO2 no varían, teniendo en cuenta que un mismo vehículo tendrá mayores valores de CO2 si se mide con la prueba WLTP que con la NEDC” afirma Mario Armero, vicepresidente ejecutivo de ANFAC. “De no hacerse así, la llegada del nuevo método de medición podría incrementar la carga impositiva que soportan los consumidores” añade Armero.