El director general de Carreteras, José Antonio Llanos, acompañado por alcaldes de la zona, visitó las obras, que ya han finalizado en la mayor parte del trazado. La Comunidad ha concluido los trabajos en la M-614, que comunica El Escorial y Guadarrama, y la M-527, entre el Valle de los Caídos y Villalba, y actualmente está actuando en el último tramo de la M-600, también entre los citados municipios. Estas actuaciones complementan los trabajos de asfaltado que ya se realizaron en el primer semestre este año, dentro del plan de refuerzo de calzadas que acomete la Consejería de Transportes e Infraestructuras.
Las tres carreteras suman una extensión de 13,5 kilómetros, y para su reforma se han utilizado 24.500 toneladas de mezcla bituminosa. Las mejoras que se están llevando a cabo en estas tres vías, que forman una «Y» en una de las zonas con mayor intensidad de tráfico de la región, se enmarcan dentro del Plan de Asfaltado de la Comunidad de Madrid.
Dentro de este Plan, la Consejería de Transportes e Infraestructuras ha destinado 4,8 millones de euros en los últimos meses para rehabilitar el firme de nueve carreteras regionales, con la extensión de más de 68.000 toneladas de aglomerado y el reciclaje de 90.400 metros cuadrados de asfalto.