La necesidad de contar con una red dedicada exclusivamente a mercancías y de reducir la discriminación de los trenes de mercancías frente a los de pasajeros se presentan como dos necesidades claves, a corto plazo, en el proceso de liberalización ferroviaria. Así lo ha manifestado Emilio Fernández, presidente de Transportes Ferroviarios Especiales S.A. (Transfesa), en la mesa redonda ”El ferrocarril: ¿Alternativa o complemento al transporte por carretera?” del IV Foro Nacional de Transporte que se ha celebrado en Madrid el 16 y el 17 de marzo, bajo el lema “El transporte, eje de la economía”. El foro está organizado por AECOC; CNTC (Comité Nacional de Transporte por Carretera) y el Ministerio de Fomento.
Fernández ha explicado las medidas que se han tomado para que el ferrocarril se utilice de una forma más eficaz y pueda convertirse en el mejor aliado de la carretera y otros modos de transporte para absorber el incremento de tráfico previsto en la UE, fijado actualmente en un 3,9% anual. Entre ellas, ha destacado la creación de la Agencia Europea para la Interoperabilidad Ferroviaria, “con el fin de desarrollar una normativa que permita que el ferrocarril sea interoperable en todo el continente y se consiga un ferrocarril europeo en contraposición a un ferrocarril local, especialmente en la normalización y simplificación de Certificado de Seguridad que hay que dar a los operadores.”
El presidente de Transfesa ha destacado como solución definitiva la creación de una red ferroviaria dedicada exclusivamente a mercancías, “ya que en una vía dedicada, al ir todos los trenes a la misma velocidad , no es necesario que unos se adelanten a otros, por lo tanto todo salen y llegan a su hora sin dificultad.” Hoy en la red ferroviaria, los trenes de pasajeros se gestionan como si también fueran dedicadas en exclusividad a ellos, ya que tiene preferencia y si hay algún problema de horario o de tracción se le retira el surco o la máquina al tren de mercancías.