Un hombre murió el pasado 19 de enero al precipitarse el camión que conducía por uno de los acantilados del paraje natural de Maro-Cerro Gordo, a la altura de Nerja (Málaga), situado en el kilómetro 302 de la carretera N-340. El vehículo vertió los 20.000 litros de aceite usado que transportaba.
La Consejería de Medio Ambiente informó de que el camión cayó desde una altura de más de 100 metros y fue derramando el aceite durante todo el trayecto, aunque el vertido se quedó a 200 metros de la playa. Como consecuencia del accidente el conductor del vehículo, de 28 años, falleció al salir despedido con el sillón y el cinturón puesto. El vertido afectó a 800 metros cuadrados de vegetación.