El informe de esta compañía, que movió cerca del 40% de los vehículos de segunda mano que se comercializaron en España el pasado año, explica que la coyuntura actual, que ha llevado a la pérdida de casi 140.000 empleos autónomos en los últimos doce meses, está obligando a este colectivo a deshacerse de los que, hasta ahora, eran sus vehículos de trabajo. Para muchos ya resulta innecesario y otro buscan recuperar conseguir dinero rápido ahora que el acceso a la financiación representa el principal problema para la supervivencia de sus negocios.
Curiosamente, el estudio muestra que los trabajadores por cuenta propia están tendiendo a retener cada vez más tiempo su “vehículo de trabajo”, tratando de estirar al máximo su vida útil para economizar en su cuenta de resultados. En el último año su edad media aumentó en siete meses, hasta situarse en más de cinco años de antigüedad, con un kilometraje de más de 96.400 kilómetros, lo que supone un rodaje anual de 19.200 kilómetros.