En 15 años, en comparación con cualquier otro tipo de neumático, los 570 millones de neumáticos verdes Michelin vendidos en todo el mundo han permitido un ahorro estimado en 9.000 millones de litros de carburante y más de 22 millones de toneladas de CO2 no emitidas a la atmósfera, es decir, el equivalente de lo que pueden captar 880 millones de árboles al año. Cada segundo permiten ahorrar 43,9 litros de carburante, es decir, 109,14 kg de CO2 no emitidos. Estas son las cifras que verán millones de personas en las cuatro esquinas del globo.
Michelin, preocupado por el medio ambiente, pretende concienciar a los consumidores de todo el mundo y mostrar de qué forma los neumáticos Michelin pueden contribuir a la conservación del medio ambiente.
La elección del neumático constituye verdaderamente un gran reto medioambiental. Las cifras que se muestran ante el público internacional así lo demuestran. Cuando los expertos se han puesto de acuerdo para reconocer el transporte por carretera como una fuente importante de emisiones de dióxido de carbono, uno de los gases de efecto invernadero origen del calentamiento climático, esta constatación reviste especial importancia.
Consciente de este reto, el Grupo Michelin, que dedica cada año casi un 4% de sus ventas netas a Investigación y Desarrollo, ha hecho del diseño de neumáticos con baja resistencia al rodamiento uno de los ejes fundamentales de su estrategia de innovación.
Para que a la hora de elegir un neumático se pueda tener en cuenta el aspecto medioambiental, Michelin ha querido que los consumidores comprendan el impacto del neumático en el consumo de carburante así como en el medio ambiente.