Esta circunstancia ha impactado en los concesionarios que han visto como los problemas de stock se acrecentaban porque buena parte de los camiones disponibles se han destinado a las grandes flotas, en operaciones que habitualmente realizan directamente las propias marcas.
Fernández ha asegurado que a los concesionarios les gustaría disponer de más vehículos en estos momentos de elevada demanda, pero ha reconocido que estas grandes operaciones también son muy positivas para las redes porque se incrementa la facturación derivada de los trabajos de mantenimiento.
“Las grandes flotas se convertirán en grandísimas flotas”
De cara al futuro, la presidenta de la división de vehículos industriales de Faconauto se ha mostrado convencida de que se seguirá produciendo una concentración en el sector durante los próximos años “y las grandes flotas se convertirán en grandísimas flotas”. Además, ha recordado que hay empresas familiares que han multiplicado su facturación vertiginosamente: “han pasado de tener 10 camiones a 500 vehículos en tres o cuatro años”.
En esta coyuntura prevé que fondos de inversión y corporaciones extranjeras sigan entrando en el sector del transporte de mercancías por carretera español y se repitan operaciones similares a las que se han cerrado durante 2022. Por su parte, los autónomos y las pymes tendrán más complicado competir en este nuevo escenario.
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