Un Reglamento europeo, publicado el pasado 15 de junio, establece el marco regulatorio armonizado en todos los Estados miembros para la expedición, verificación y aceptación de los certificados Covid-19 interoperables de vacunación, de prueba diagnóstica y de recuperación de la enfermedad.
Algunos países como Italia, han eximido de la obligatoriedad de acreditar su pasaporte sanitario para los desplazamientos a los transportistas extranjeros que accedan a su territorio, exigiendo exclusivamente que cumplimenten una Declaración de Desplazamiento, preferentemente de modo on line o bien en papel.
Sin embargo, no es el caso de Francia, que desde este pasado lunes ha establecido la obligatoriedad de exigir el certificado covid no sólo en los pasos fronterizos sino también para acceder a cafeterías, restaurantes, centros comerciales, hospitales, centros médico-sociales, al igual que para viajar en avión, tren o autobús en el caso de trayectos de larga distancia.
“Muchos transportistas españoles que están teniendo numerosas dificultades para poder desarrollar su actividad debido a que buena parte de los códigos QR que se incorporan a los certificados covid expedidos por las Consejerías de Sanidad de las Comunidades Autónomas no son legibles en los controles que llevan a cabo las autoridades francesas en algunos pasos fronterizos, entorpeciendo gravemente la actividad del transporte internacional de mercancías”, denuncian desde Fenadismer.
Francia pone un nuevo obstáculo a los transportistas
En los últimos meses la Unión Europea ha venido trabajando en la puesta en marcha del denominado coloquialmente “pasaporte sanitario europeo”, un certificado oficial en formato digital acreditativo de la situación sanitaria de su titular a efectos del covid-19 para permitir una mayor movilidad en el seno de la Unión Europea.
