“Esta fortaleza nos ofrece una sólida base para afrontar la exigente transformación en la industria de la automoción mediante la digitalización, la electromovilidad y la conducción autónoma”, aseguró el director ejecutivo de la compañía, Stefan Sommer
[ZF apuesta por la seguridad en carretera]
Su posición también ha permitido a ZF aumentar su gasto en investigación y desarrollo a 2.000 millones de euros, lo que representa el 5,5% de las ventas, mientras que en 2015 dedicaba el 4,8%. Este aumento se ha debido a la intensificación de las actividades de desarrollo en las divisiones de Tecnología de Seguridad Activa y Pasiva y Electromovilidad.
En 2017, ZF espera unas ventas dentro del Grupo de aproximadamente 36.000 millones de euros, con un margen EBIT ajustado de más del 6% y un margen EBITDA ajustado por encima del 10%. Y con un flujo de caja disponible ajustado considerablemente superior a 1.000 millones de euros para el año en curso, “ZF seguirá reduciendo su deuda e invirtiendo en el futuro”, concluye Sommer.