El programa incluyó una misa y la posterior bendición de vehículos en el Centro de Transportes. Por la tarde se celebró la tradicional comida de hermandad en el restaurante Venta Magullo.
Durante la jornada se expusieron diversos camiones históricos de camionesclasicos.com y se celebró el concurso de vehículos decorados.
Por último, se rindió homenaje a un transportista autónomo -socio de Aserta- fallecido por enfermedad en noviembre pasado.