El motor que utiliza IVECO en su modelo HI-ROAD impulsado con gas natural está fabricado por FPT. Tomando como base un propulsor Cursor 8, se han realizado las modificaciones oportunas para reconvertirlo a ciclo Otto. Este motor a gas utiliza un sistema de alimentación de inyección indirecta secuencial y multipunto, que garantiza una combustión completa y estable, y evita los retornos de llama. Los pistones del motor también han sido rediseñados para facilitar una mejor combustión.
Su potencia es de 330cv y su par motor máximo es de 1.300 Nm entre las 1.200 y 1.785 rpm. Posiblemente los datos no impresionen, pero no hay que olvidar que se trata de un motor con muy poco cubicaje. Monta un turbocompresor con un intercambiador de aire/aire. Para garantizar una buena y controlada respuesta en todo el régimen de giro del motor, este turbocompresor está equipado con válvula Wastegate. Al tratarse de un motor con ciclo Otto y con una relación de compresión menor a un ciclo diesel, es francamente silencioso incluso trabajando con revoluciones más altas.
Casi 850 km de autonomía
IVECO ha solucionado el problema de autonomía con la instalación de dos formas muy distintas de llevar el gas en este vehículo. Por un lado monta un depósito criogénico de 567 litros de gas natural que lo mantiene de forma líquida (GNL) a -130º y a una presión de 10 bares. Este depósito hace las funciones de principal. El segundo modo de llevarlo es de manera comprimida (GNC), para ello equipa el vehículo con cuatro botellas de 70 litros cada uno a una presión de 200 bares. Lo que hace un total de 1.400 litros. Sumando los dos sistemas nos da una autonomía de cerca de 850 kilómetros, algo que le hace un camión bastante operativo en la media y larga distancia. En cuanto al consumo puede suponer una rebaja cercana al 40% de reducción en comparación con un motor diesel.
Eficacia silenciosa
Pocas veces se tiene la posibilidad de realizar una toma de contacto con un camión con semirremolque equipado con motor a gas. IVECO nos ha dado la oportunidad de realizar unos kilómetros sin entrar en prueba dinámica de consumo, no era el momento. Esta vez nos hemos dedicado a disfrutar de una conducción totalmente diferente a la que solemos realizar con vehículos equipados con motores diesel. Llama la atención el silencio que se respira en la cabina, algo inusual en otro tipo de vehículos. Por otro lado el rango de revoluciones necesarias en este tipo de motores es totalmente distinto al de un motor diesel, es necesario mantener el motor en la zona alta de par, si no es así corres el peligro de que el motor se venga abajo y tengas que realizar más cambios de marcha de los necesarios.
A un camión de 330 cv tampoco se le puede pedir demasiado, en nuestra toma de contacto íbamos con las 40.000 Tm de rigor y la verdad que el camión llaneaba bien.
Su potencia es de 330cv y su par motor máximo es de 1.300 Nm entre las 1.200 y 1.785 rpm. Posiblemente los datos no impresionen, pero no hay que olvidar que se trata de un motor con muy poco cubicaje. Monta un turbocompresor con un intercambiador de aire/aire. Para garantizar una buena y controlada respuesta en todo el régimen de giro del motor, este turbocompresor está equipado con válvula Wastegate. Al tratarse de un motor con ciclo Otto y con una relación de compresión menor a un ciclo diesel, es francamente silencioso incluso trabajando con revoluciones más altas.
Casi 850 km de autonomía
IVECO ha solucionado el problema de autonomía con la instalación de dos formas muy distintas de llevar el gas en este vehículo. Por un lado monta un depósito criogénico de 567 litros de gas natural que lo mantiene de forma líquida (GNL) a -130º y a una presión de 10 bares. Este depósito hace las funciones de principal. El segundo modo de llevarlo es de manera comprimida (GNC), para ello equipa el vehículo con cuatro botellas de 70 litros cada uno a una presión de 200 bares. Lo que hace un total de 1.400 litros. Sumando los dos sistemas nos da una autonomía de cerca de 850 kilómetros, algo que le hace un camión bastante operativo en la media y larga distancia. En cuanto al consumo puede suponer una rebaja cercana al 40% de reducción en comparación con un motor diesel.
Eficacia silenciosa
Pocas veces se tiene la posibilidad de realizar una toma de contacto con un camión con semirremolque equipado con motor a gas. IVECO nos ha dado la oportunidad de realizar unos kilómetros sin entrar en prueba dinámica de consumo, no era el momento. Esta vez nos hemos dedicado a disfrutar de una conducción totalmente diferente a la que solemos realizar con vehículos equipados con motores diesel. Llama la atención el silencio que se respira en la cabina, algo inusual en otro tipo de vehículos. Por otro lado el rango de revoluciones necesarias en este tipo de motores es totalmente distinto al de un motor diesel, es necesario mantener el motor en la zona alta de par, si no es así corres el peligro de que el motor se venga abajo y tengas que realizar más cambios de marcha de los necesarios.
A un camión de 330 cv tampoco se le puede pedir demasiado, en nuestra toma de contacto íbamos con las 40.000 Tm de rigor y la verdad que el camión llaneaba bien.
A favor:
– Bajo consumo
– Baja sonoridad del motor dentro de la cabina
– Vehículo ecológico
En contra:
– Calidad de acabados en cabina
– Potencia del motor
– Caja de cambios manual
Manuel Rujas – Jefe de Pruebas de Vehículos Pesados